
Son muchos vientos azotando la diosa Tierra,
ellos mismos provienen de si misma, asi ha de ser,
la voluntad de las profundidades, inamovible es.
El tronco y la roca amigos son, un dia desaparecen,
saben que el final les espera, siguen sin moverse.
El pensamiento divino viene de las brisas
que emana la cueva del silencio,
muchos se aventuran y en ello perecen,
no importa morir, pues quien busca la cueva
del silencio, la muerte, le viene suave y apacible.
Dejate que las aguas te lleven, frias
como el vacio y calientes como el pensamiento.
El cielo estrellas tiene, y de ellas se sustenta,
y ellas de el se sustenta,
pero el cielo va mucho mas alla,
no hay descanso ni reposo en el cielo,
no hay fatiga ni suspiro, ni suspiro ni fatiga,
el cielo es nada cuando lo es todo,
cierra los ojos la planta que florece,
sabiendo que su belleza se desvanece,
pues todo lo bello que muere
muere porque al cielo pertenece.